viernes, 20 de mayo de 2011

LA MENTE Y LO MENTAL

Del Taller de Espiritualidad del primer sábado de Abril


«Nuestra capacidad de conocer, sentir y percibir tiene dos niveles dos niveles: el que llamamos “mente”, que está al servicio de la necesidad y la supervivencia, y el que llamamos “Conciencia”, que es la condición del puro Testigo.» (p. 17)


« Cuando me identifico con la mente, como contrapuesto al mundo exterior –el de las objetivaciones–, entonces el Absoluto está fuera de mí y del mundo. Así cuando aparece la mente y me identifico con ella, aparece el mundo y aparece Dios. No obstante, lo mental no tiene ninguna existencia en tanto entidad separada; por tanto, tampoco la tienen, como entidades separadas, sus objetivaciones: el ego, el mundo y Dios.» (p. 21)

«Lo mental es el resultado de la identificación del puro Ser-Conciencia con el cuerpo. Esa identificación es el fundamento de la individuación y de la falsa entidad del ego.» (p. 23)

«La idea “yo soy el cuerpo-mente” crea la inquietud y el miedo porque abre a la amenaza de la muerte y oscurece la visión del universo» (p. 23)

«El ego y su mundo –y, por tanto, también el nacimiento y la muerte– se sitúan en lo mental. Si lo mental es destruido, todo [nacimiento y muerte] desaparece con él.» (p. 25)

«Mi ego verdadero no es la supuesta entidad autónoma venida a este mundo, es el Absoluto mismo desplegando y dirigiendo los procesos que este cuerpo requiere para vivir.» (p. 26)

«No soy ni lo mental ligado al cuerpo, ni las ideas de lo mental, ni tampoco el cuerpo. Mi ser es el Absoluto mismo desplegándose como un bucle del Ser-Conciencia, como si fuera una entidad individual.» (p. 26)


Marià Corbí, Más allá de los límites. Meditaciones sobre la Unidad, CETR, Barcelona 2009.

miércoles, 4 de mayo de 2011

NO DUALIDAD Y ABSOLUTO

Del Taller de Espiritualidad Primer Sábado de Marzo

«Para ver lo que hay, se ha de comprender, con toda claridad, que no hay ni sujetos ni objetos, ni individuos. Lo que es, es una ausencia completa y absoluta de todo eso. Esa ausencia completa, ese vacío total, es ser sin individualidad, es subjetividad pura sin dualidad ninguna. Está libre de formas aunque le conozcamos en formas; trasciende el mundo de todas nuestras realidades aunque le tengamos que conocer en ellas. Hay que aprender a buscar sabiendo que lo que se busca no es ningún objeto, sujeto o entidad, y sabiendo, también, que nadie está buscando. Esa es la gran pista: nada que buscar desde ningún sitio. ¿Cómo va a ser el Absoluto un sujeto, si los sujetos no son reales? ¿Cómo va a ser algo objetivo que busca un sujeto, si la noción de objeto surge de una ilusión?»

«Tampoco hay un Principio Absoluto y su manifestación, porque en el Absoluto no hay dualidad alguna. La manifestación pertenece a la naturaleza misma del Absoluto.» «Las apariencias son la presencia inmediata y directa del Absoluto. Lo que nuestros sentidos ven y oyen y nuestra carne toca, es la presencia inmediata y directa del Absoluto vacío de toda objetividad, de toda subjetividad y de toda entidad, pero directamente presente.»


(Marià Corbí, Más allá de los límites. Meditaciones sobre la unidad, CETR, Barcelona 2009, p. 15)

LA ESPIRITUALIDAD, CONOCIMIENTO GRATUITO

Del Taller de Espiritualidad Primer Sábado de Mes. Febrero

«Conocimiento gratuito y absoluto que es una resonancia sin límites, conocimiento que libera de toda desconfianza y abre a la entrega sin reservas a “Eso único” que se dice con claridad en esa noticia gratuita y absoluta; que hace que el que conoce no se sienta amenazado por nada, sino, por el contrario, se sienta anclado en la realidad.»

«Esa cualidad peculiar del conocer y del sentir –que no es ningún nuevo conocimiento ni ningún nuevo sentir, sino una clara resonancia de absoluto–, destruye el egoísmo y abre a un amor incondicional a todo, conduce a la paz y a la ecuanimidad, porque al romper la clausura del ego sobre sí mismo, elimina la fuente de todo deseo y de todo temor. Logra que todo conocimiento y todo sentir de delimitaciones objetivas y subjetivas de formas y de dualidades, devenga conocimiento y sentir del “sin límites”, del “sin forma”, de lo “no-dual”.»


(Marià Corbí, Más allá de los límites. Meditaciones sobre la unidad, CETR, Barcelona 2009, p. 7)